Echo de menos tu robusto tronco, formado por capas de largos años.Ese aroma a madera y hierba y notar al tacto la rugosidad de la piel que te compone.
Echo de menos el crujir de la brisa veraniega entre tus ramas, mientras las hojas saltan de alegría.
El frescor que permanece bajo tu sombra.
Echo de menos tu manto ocre al caer el otoño.
Tu nostalgia hecha figura y las llagas del invierno.
Echo de menos los bulbos palpitándole a la primavera.
El vaivén de tus hermanos mientras os azota el aire.
Ahora miro al cielo y sólo veo cielo, ya el bosque no me impide verlo.
Echo de menos no encontrar tus raíces en el suelo.
Extraño tu batirte en duelo con las estrellas. Ya no bailas con la luna mientras te observo.
Tu bella silueta en el empedrado o en el prado.
Tu nostalgia hecha figura y las llagas del invierno.
Echo de menos los bulbos palpitándole a la primavera.
El vaivén de tus hermanos mientras os azota el aire.
Ahora miro al cielo y sólo veo cielo, ya el bosque no me impide verlo.
Echo de menos no encontrar tus raíces en el suelo.
Extraño tu batirte en duelo con las estrellas. Ya no bailas con la luna mientras te observo.
Tu bella silueta en el empedrado o en el prado.
Tu alma impregnando los fríos edificios de ladrillo o tu espíritu en el monte.
Echo de menos verte para recoger de ti tus suculentos frutos.
Las hormigas rondándote en el mediodía.
No trinan los pájaros coqueteando a todas horas.
Ya no está esa niña que se atrevía a trepar para atraparte.
Echo de menos esos brazos que encontraban en tu cuerpo otro abrazo.
Echo de menos verte para recoger de ti tus suculentos frutos.
Las hormigas rondándote en el mediodía.
No trinan los pájaros coqueteando a todas horas.
Ya no está esa niña que se atrevía a trepar para atraparte.
Echo de menos esos brazos que encontraban en tu cuerpo otro abrazo.
8 comentarios:
Precioso de verdad y lleno de nostagial de algo tan hermoso como ese bosque lleno de vidas ese árboles abrazando el aire y regalándonos sus sombras y algún que otro corazón dibujado con promesas luego rotas.
Yo también echo de menos ese olor a vida!
Feliz domingo.
Besoss.
Nunca he sido muy amiga de trepar arboles, siempre me dio vertigo. Quiza por ello me he sentido siempre mas feliz en la edad adulta que en la ninyez.
Un supersaludo
Evocador y delicioso tu post... Esta claro que el otoño es el mes de la nostalgia ;-) yo del mar y tú del bosque.
besos mil
Muy bello, felicidades escribes genial y transmites mucho con tus palabras. besos
Precioso. Muy bonito. Y me identifico perfectamente.
¿Basado en hechos reales como las pelis de mediodía?
Lucía, SW, Isa, Lola Y Mel, muchas gracias por vuestras palabras. Es realmente motivador encontrar que los recuerdos y las palabras propias os gusten u os evoquen a vosotras vuestras propias nostalgias.
Y sí Mel, basada en hechos reales... ya sabes, la Finca... la infancia, la naturaleza es una experiencia única e inigualable para una niña...
Jo...qué bonito.
Este poema me recuerda el tema de Amaral,"en el rio"....su denuncia y su nostalgia.
Todos conservamos ese sitio desaparecido de la niñez en un lugar verde,quisera que mi paraiso fuese así.
Besotes.
Conserva siempre estos recuerdos pues son tesoros que hay que guardar...
Besinos.
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