jueves, 26 de diciembre de 2013

The End

Después de mucho meditar, ha llegado el momento de decir adiós.
He ido releyendo mis últimas entradas y me quedo con la sensación agria de no haber podido transmitir lo que realmente siento.
Agradezco que me hayáis leído, desde luego puedo afirmar que tengo la sensación de haber recibido en estos ocho (casi nueve) años, mucho más de lo que he ofrecido. Sólo por eso ya ha merecido la pena.
Han cambiado muchas cosas desde que comencé este blog, la primera yo y sobre todo, mis circunstancias personales.
Siento que no puedo contar más, estoy vacía y no quiero tener la sensación de tener esta parte de mi vida tan abandonada.
Nunca quise dejarlo, apuesto por este pequeño diario que deja ver tanto de mi... pero también sé que necesito tiempo para recomponerme, que me resulto tan ajena a mi misa, que no soy honesta cuando escribo haciendo tantos esfuerzos.
Seguiré leyéndoos, a todos los que ya formáis parte de mi e incluso me seguís mencionando en alguno de vuestros blogs :)
Gracias por todo y gracias por esa compañía que tanto bien me ha hecho en los momentos más duros de mi vida.