viernes, 18 de junio de 2010

Si vienes.

Estoy ausente
pero sigo reservando mis espacios para ti.
Ven a rescatarme cuando quieras,
que cada hueco de mi piel anhela
que lo recorran lentamente.
Aventúrate a desenredar
los nudos de la distancia
porque si vienes
y me encuentras,
no dudaré en acogerte.
Cálida.
Febril.
Extrañándote.
Deseándote.

domingo, 13 de junio de 2010

Vivir, vivir

Vida,
que te instalas en el brillo de mis ojos
y me ofreces el tacto de tu piel.
Vida,
que me deleitas con sabores dulces y salados
y me das el aroma fresco del amanecer.
Vida,
que me estallas en el pecho,
y me recorres hasta la punta de los dedos.
Vida,
junto a ti recorro el mundo entero
y en la cima casi vuelo.
Vida,
que me dejas sentir miedo
que me das el azul cielo.
Vida,
que me ofreces el camino
para recorrerlo entero.
Vida,
que me das la rosa
y también sus espinas.
Vida alegre,
mala vida,
vida incierta,
vida para ser vivida.

jueves, 10 de junio de 2010

Nudos en el tronco.

Me he querido saciar de ti,
como el pozo que retiene el agua de su arroyo subterráneo.
Y he desgajado el aire con mis manos,
creando un espacio para ti en cada partícula.
Te he dado tanto hasta quedarme seca por dentro,
como el desierto conteniendo infinitos espejismos.
No era yo quien tenía que atraparte,
ni ser pétalo de rosa en tu turbada mejilla.
Ni me buscabas a mi cuando acercabas tu mirada a mi cuerpo.
Ni me quisiste encontrar nunca.
Me desgasté los zapatos yendo tras de ti
mientras tú escapabas por caminos empedrados.
Y me dejé el alma en cada huella pisada,
marcada por el mutismo de tu boca.
Esos labios que no hablaban para mi,
ni me besaban conscientes de mi presencia.
Me he querido cubrir de ti,
como el cuerpo que busca el arrullo de la cálida manta.
Y he encontrado la penumbra
de una casa abandonada y vacía
sin nada más que las ventanas sosteniendo el marco sin pared.

jueves, 3 de junio de 2010

DEGUSTACIÓN.

Sobre la mesa
grandilocuentes palabras
y gloriosas promesas.

Argumentos recubiertos
de exquisito chocolate
y aroma suculento.

Elaboradas frases
rellenas de merengue
pomposos discursos con clase.

Me despierto con hambre
de oir algo que me sacie.