No es que piense que los maestros y profesores sean importantes para asegurar la calidad del sistema educativo, es que son IMPRESCINDIBLES.
Dejando al margen a quienes ejercen su profesión sin amarla, considero que quien se dedica a la docencia estando en contacto directo con los alumnos es porque tiene VOCACIÓN.
Afortunadamente tengo a mi alrededor gente estupenda que son maestros, que ponen a disposición de sus alumnos toda su energía, creatividad, entusiasmo y conocimiento. Adoran trabajar con ellos, ver sus progresos, procurando en la mayor medida de lo posible sacar lo mejor de cada uno... aprovechan los errores que se producen en el trayecto como impulso al aprendizaje, sus aulas se convierten en espacios donde se procura que todos tengan su sitio, su voz, su propia personalidad.
Estos maestros y profesores "llegan" a sus alumnos (nuestros hijos) de tal forma que les pueden llegar a marcar para toda la vida... durante todo el año llegan a ser sus modelos, el espejo en el que generaciones (futuras) se miran y proyectan...
Por eso no entiendo nada, no entiendo que a nivel público, se recorte en "recursos" humanos hasta el punto de no llegar a cubrir necesidades básicas dentro del aula (y por extensión, en todo el contexto educativo). Nunca entenderé que se recorte de forma tan masiva e indiscriminada de un pilar básico que contribuye sin duda alguna al auténtico bienestar social.
Os dejo aquí un corto estupendo de Beatriz M. Sanchís al que llegué por casualidad: disfrutad de él (sé que lo haréis). Y a vosotros, maestros y profesores, que dentro de nada comenzáis vuestro curso escolar, espero que os traiga recuerdos de esa parte tan agradecida de la docencia: el progreso y la evolución del grupo con el que trabajáis a diario. Hay buenos y malos momentos, pero quedaros siempre con los BUENOS... :)
Viñeta por cortesía de http://www.elmundoseacaba.com/public/news/
1 comentario:
Aaaamen.
Un supersaludo
Publicar un comentario