sábado, 7 de febrero de 2009

LIVING ZARAGOZA

Viernes y me levanto de madrugada dejando mi casa bajo el arrullo de la respiración de mi hijo. Aún me cuesta separarme de él en acontecimientos tan fugaces como éste. He viajado a Zaragoza por trabajo.
A las 7.30 estaba en el AVE viendo la película del Increíble Hulk, con los apuntes de la presentación en mano y la sensación de querer aprisionar cada instante para luego compartirlo con vosotros.
Al pasar por los paisajes de Guadalajara, entre llanos campos y empinados riscos, he contemplado el manto inmenso de la nieve, cubriéndolo todo, tejados y copas por igual.

Una hora y media después he llegado a Zaragoza y el taxi me ha dejado sin café en el cuerpo pero con adrenalina suficiente para afrontar mi mañana laboral.
A pesar de la pereza que me produce viajar últimamente, la experiencia ha sido positiva, siempre me ha gustado conocer lugares nuevos, perderme entre la vida de otras gentes, imaginar cómo se viviría en ese lugar tan cerca del Ebro. Por un momento, yo no era esa madre pendiente de su hijo, ni esa pareja eternamente colgada de las manos de otro, he sido yo, la que trabaja, la que busca el taxi y entabla una amigable conversación con el señor que te vende estampitas a las puertas de la Catedral. Y en esos pequeños espacios de independencia, vuelvo a reencontrarme a mi misma, mucho antes de ser la persona llena de obligaciones e instantes compartidos.
Media hora sólo de respiro para acercarme al centro y ver la Plaza del Pilar. Saqué fotos con el móvil:




8 comentarios:

LUCIA-M dijo...

Esta entrada me recordó el día que deje a mi ex y empecer hacer todo sola
Esa sensación de libertad, no la olvidare nunca. Claro que tu caso es diferente
Porque vuelve a casa, junto a alguien con quien eres feliz,
Y yo me alegro mucho por eso.
Me gusto tú entrada y como lo narra.
Preciosa fotos!
Un beso.

Niña hechicera dijo...

Cuando me marcho de gira con la vocalista tengo esa misma sensación,que,después de tener a mi gordita,cada vez es más difícil de disfrutar plenamente...pero trato de hacer un poco como que no escucho esa voz interior que me repite "oye,que ya no eres tú sola...recuerdalo",joé,chica,leo en ti como en mi propia vida!!!
Seguro que por eso me gusta tanto leerte y tu tb!!)
Un besote,mu chulas las fotos.

Niña hechicera dijo...

Por cierto,una sugerencia....¿porque no quitas la opción de "verificación de la palabra"...a mi me lo recomendó Bolzano y así todo es más rápido ala hora de conmentar.
Kisses

Ciudadana C dijo...

Hola ambas dos...
Lucía, me recuerdas a esa princesa que creía en los cuentos de hadas... conservas un espíritu romántico, a pesar de todo lo que has pasado a costa de un despiadado ex... He leído tu entrada de hoy y quería decírtelo.
Es verdad que me encanta leerte Rose, me siento muy identificada contigo. Estoy leyendo un libro que en verdad es algo "obvio", se llama "El Secreto", me lo regaló mi hermano porque dice "que a mi estas cosas me molan" y bueno, en él dice básicamente que solemos atraer aquéllo que se nos parece... quizá tenga algo de razó ;D
Y sí, leí la recomendación de verificación de palabra y por esas cosas tontas de "ya lo haré" he ido dejándolo. Prometo q mañana vuelvo a investigar desde el trabajo, porque ya te dije que mi ordenador a veces ni manda msj de correo por lo lento que va.
Mañana... I promise.

Melisa dijo...

Lo malo de quitar la verificación de la palabra es que se te puede colar spam.

De Zaragoza mi mejores recuerdos son gastronómicos. Incluyendo los caramelos esos tremebundos que no recuerdo cómo se llaman.

¿Viste lablogosferia últimamente? :)

Ciudadana C dijo...

Hello Mel,
"ADOQUINES" jajaja. ¿Por qué será?
Espero que no me entre spam.
Vi la blogosferia y me siento halagada.

Glup

Cris dijo...

Gemma, por muy madres y esposas y amantes y amigas y todo lo que quieras necesitamos ser YO de vez en cuando. En Dinamarca es bastante común el hacer escapaditas con amigas de vez en cuando. O hacer algo que sea para ti y que tengas que ir tu sola (algun curso o cosas de esasa) Y ese momento que has tenido en Zaragoza en el que te has dado cuenta de que tu eres TU ha sido seguramente terapeutico. De vez en cuando tenemos que alejarnos un poquito y estar un rato con nosotras mismas. Eso también nos da perspectiva de nuestra vida, es bonito vover y reencontrarte con alguien que te ha echado de menos y que tú también has echado de menos. Me alegro que hayas tenido ese momento especial. Un saludo!

Bellini dijo...

Muy bonita la entrada de hoy. Esos momentos en que se vuelve a ser "yo" no solo "madre" "pareja"... A mi a veces me hace sentir un poco perdida, sin saber exactamente que soy "yo" ahora que soy otras tantas cosas que no era antes y que superan todo lo que era en "mi vida anterior"... Esta "conciliacion" tambien es dificil.

Melisa, al leer lo de los caramelos me ha transportado en un flah a mi infancia, un fin de semana en Zaragoza con la familia, las fiestas del Pilar y esos caramelos tan grandes y tan ricos... Curioso como algo que nunca habia recordado de repente esta presente de forma tan viva, podia casi saborearlos, olerlos y oir el ruido de las calles...