jueves, 18 de diciembre de 2008

UN DESALOJO, OTRA OKUPACIÓN

Ayer pasé otra vez por un edificio OKUPADO. Me llamó especialmente la atención porque habían colgado de sus balconadas unos cartelones anunciando CONCIERTO OKUPA:
"ETXANDO MIERDA"
"ALIENTO A METADONA"
- "Ay! ¡Qué mayor me estoy haciendo!"- pensé.
Y dispuesta a no dejarme llevar por prejuicios, indagué en la red de redes sobre el movimiento okupa, por lo visto tiene unos fundamentos urbanos, sociales, pero, sobre todo, de repensamiento de la sociedad tal y como está construida. Por un lado, se basa en principios anarquistas donde se cuestiona la sociedad establecida y por el otro, se deja influenciar por el underground y los movimientos comunales o hippies de la época. Se considera un movimiento antirracista, antifascista, antiespeculación, a favor de la igualdad de sexos y de personas, a favor de los derechos de los pueblos, trabajadores, ecologismo, antiimperialismo y que sobrepone el interés comunal y social a la propiedad privada a cualquier coste.
Hasta ahí he de decir que cualquier grupo que reivindica bajo estos preceptos tiene mi más absoluta aprobación... pero mucho me temo que son bastanes, con ideas algo más confusas, los que se han subido al carro de la okupación.
En mi ciudad ya ha habido varios desalojos, algunos de ellos bastante sonados: se trataba de una casita que se encontraba en uno de los parques más grandes que tenemos, la policía se fue al abordaje tras unos cuantos avisos y les sacaron a palos de allí, hubo heridos leves y muchas protestas: según los "desokupados" prestaban ayudas sociales de forma totalmente gratuita.
En junio de 2007, nació "El Cierre" que surgió de la ocupación de una antigua casa de dos plantas, medio en ruinas y situada al lado de un descampado, muy cerca de la Universidad Carlos III.
Y sin querer casi pronunciarme al respecto ¿qué diré de lo que he visto al pasar por ahí?: en su inmensa mayoría gente joven, con aspecto de "alternativos", con una imagen urbana y sobre todo, sobre todo... liándose o fumándose sus porritos de moda.
Y como he dicho que no quiero pecar de "karka" y que no sólo las primeras impresiones son las que valen... ¿me contáis cual es vuestra opinión al respecto?

4 comentarios:

Melisa dijo...

No conozco el percal, pero imagino que habrá de todo: casas okupadas que realmente desarrollen labores sociales y/o culturales. Y también mucho jeta pasado de humos.

LUCIA-M dijo...

Bueno… la verdad, que hay de todo. yo trabajo en asunto sociales
de la comunidad, de Madrid,
Y aunque estoy en la violencia del género, estuve un tiempo con esas gentes.
Y la verdad que la mayoría hacen maravillas culturales en esas casas
Pero hay una minoría que la usan para provocar
En fin, esto es como todo.
Buena entrada.
Un beso.

Gem dijo...

Personalmente no tengo nada en contra de ellos entre otras cosas porque no conozco a ninguno lo sufiente pero me hago dos preguntas :
También se puede desarrollar labores sociales o culturales siendo un currante , pagando impuestos y el alquiler de una vivienda no?
Que nos parecería si el edificio en cuestión fuese de nuestra propiedad?
Un besín

Cris dijo...

Como bien dices, creo que hay muchos que se han subido al carro okupa... Es dificil ahora saber quien reivindica una idea o quien busca un sitio sin tener que pagar para estar tranquilamente mirando al sol. Sabes en Copenhague ya hace más de un anyo desokuparon un edificio, no eran exactamente okupas pero bueno, defendían esas ideas, hacian labores sociales, integraban a jóvenes, hacian acitividades artísticas, etc. Los desokuparon por una razón por varias razones y les ofrecían destintintos centros para sus actividades. Bueno la que se armó. Ahí es lo que yo no entiendo, hablan de una filosofia, de una manera de entender el mundo pero a la hora de protestar destrozan todo lo que hay alrededor. Quemaros coches y rompieron y desvalijaron un montón de tiendas. Cada dos por tres te levantabas por la manana con la noticia de que habían quemado algo. El pobre hombre de la tienda que bastante tienen con sobrevivir en tiempos de crisis encima van y le rompen el escaparate y de paso se llevan algunas cosillas como quien no quiere la cosa. O imaginate que bajas por la manana a trabajar y te encuentras con tu coche quemado. Tu coche que no es símbolo de nada, si no tu medio de transporte para ti y para tu familia. Ahi es que no paso, me parecen entonces críos con rabieta y nada más.