Hace poco leí una cita que me inspiró sobremanera. Teniendo en cuenta la "rachita" emocional en línea descendente que llevo, agradecí a la "divina providencia" que la pusiese en mi camino y ante mis ojos:
Nadie puede hacer que te sientas mal, si no es con tu consentimiento (Eleanor Roosvelt)
Yo tengo otra "cita" que va más conmigo y que también va más en la línea de cómo me estoy sintiendo en estos días:
Cuanto más te agachas, más se te ve el culo.
Y es que, después de algo más de tres décadas vividas, tengo una larga largísima lista de cosas que me hacen sentir mal. Éstas son algunas:
- No soy capaz de decir "no".
- No soy capaz de no sentirme culpable por todo lo que no funciona a mi alrededor.
- No soy capaz de no hacerme responsable de los problemas ajenos para hacerlos propios.
- No soy capaz de no tomármelo todo de forma personal.
- No soy capaz de no luchar contra mí misma.
- No soy capaz de aceptarme tal y como soy.
Ser consciente de estas limitaciones es demencial. Luchar entre lo que sabes que deberías hacer y lo que realmente acabas haciendo supone un absoluto desgaste para mi cerebro. Cuando soy capaz de atender a todo, entonces todo va bien, pero si por algún casual, no lo consigo, siento que he fallado como persona.
Lo cierto es que no sólo me he dado permiso a mí misma para hacerme daño, sino que me temo que también se lo he dado a una gran parte de las personas que me rodean.
Ayer mismo comentaba el tema con una gran amiga que me decía una y otra vez que tenía que ser más egoísta. Pero reconozco que soy incapaz de desprenderme de ese sentimiento de culpa constante. Todo, absolutamente todo me duele.
¿Qué hacer?
¿Es la ASERTIVIDAD la respuesta?
8 comentarios:
Pues yo no sé cuál es la solución, supongo que la asertividad es lo más correcto y beneficioso pero a mi, cuando estoy con el día torcido y veo que todo me duele, lo último que me apetece es "trabajarme" a nivel psicológico. Sé que es en beneficio mío pero me da mucha rabia pensar que mientras yo me analizo y tomo conciencia de mi misma la mayoría de los que me rodean tiran por el lado más fácil, el del egoísmo. Estos últimos meses es lo que he practicado, he tratado de convertirme en lo que no soy en esencia y la verdad me ha ido bastante bien, así que de momento, y hasta que me sienta con más fuerzas para volver al trabajo psicológico, voy a seguir por el camino fácil como los demás. Egoísmo puro y duro. Como diría una canción no recuerdo de quién: Me, myself and I, esas son mis prioridades.
Te entiendo perfectamente y muchos días acabas vacía sin saber por qué y es que la gente (sin saberlo claro) actúan de chupopteros y te sacan las energías. A mi me pasa como a ti. Y en el trabajo no veas, había situaciones que las llevaba fatal. Pero desde que comencé mi viaje al interior ya hace un tiempo la cosa ha mejorado. El conocer el mundo espiritual ha hecho que me transforme poco a poco. He visto situaciones que con la distancia me he quedado asombrada de la poca importancia que tiene todo... Cada uno tenemos un camino que recorrer, lecciones que aprender y obstaculos que saltar en la vida que hemos elegido. Tambien tenemos que aprender a "manejarnos" a nosotros mismos. El superar todo eso y estar bien contigo misma (que no siempre es tan facil como lo pintan) es el camino de la vida que te llevará a la plenitud. Pero es muy difícil. O resumido como dice una amiga mia mexicana: cada uno conoce la cruz de su parroquia y hay que cargar con ella. Y yo anyado que en esta vida hay que aprender cómo llevarla sin que se note el peso y al final encontrar la grúa que te la lleve :-)
La solución está, como siempre, en el equilibrio. Las personas, por más que nos empeñemos en pensar lo contrario, somos animales. Como todo animal luchamos por sobrevivir de manera que buscamos continuamente nuestro bienestar sin importarnos el del vecino. Claro, que eso es instintivo, pero nosotros no somos sólo instinto, sino que tenemos moral, ética, en definitiva: conciencia. La conciencia controla en la medida que le es posible a nuestros instintos, de manera que convierte nuestra conducta en algo más racional y no visceral. Son las dos fuerzas que guían nuestros actos.
Si damos demasiado poder a la conciencia, a nuestra racionalidad, nos encontraremos ante situaciones como las que tú describes, y por las que hemos pasado muchos. Anteponemos el bienestar de nuestro entorno al nuestro. Pensamos como piezas de un colectivo e intentamos encontrar lo mejor para él, pues creemos que eso nos reportará algo bueno también a nosotros. Generalmente eso nos hace olvidarnos de nuestras prioridades o necesidades para volcarnos en las del grupo.
Sin embargo, cuando la concienca cede poder a los instintos, el egoísmo aflora, y quizás suframos menos, pues accedemos o buscamos con ahínco nuestro bienestar, pero, por contra, nos volvemos individualistas y nos alejamos del grupo.
Lo ideal, es saber repartir nuestro esfuerzo a nuestras dos mitades, y saber elegir cuándo debe dominar una, y cuando la otra. Decir esto es sencillo, no lo es tanto ponerlo en práctica, pero no es imposible.
Tú necesitas ahora ser instintiva, satisfacer tus inquietudes y necesidades, pero las que conciernan a ti. No es tuya la necesidad de que una persona cercana se sienta mejor. Es tuya la necesidad de que tú te sientas mejor.
Quiérete, gústate, ámate y cuando disfrutes de ti misma, te sientas cómoda contigo y te ayudes podrás hacer disfrutar a los demás, hacerles sentir cómodos y sobretodo, ayudarles.
Perdón por el rollo que he soltado, pero se me sueltan los dedos y no sé parar.
Un beso!!
Gracias por tu visita a mi blog,
Y tus palabras
Uff!!! muchas preguntas y yo ahora estoy mas o menos igual
Porque estoy decidiendo en mi vida rompiendo cosas
Y hay días que me siento mal, culpable y todo eso…
Luego me digo es mi vida? Nadie la vivirá por mí
Así que estoy echa un lió.
Pero una cosa tengo clara que siempre tenemos que ser nosotros mismos
Guste o no a los demás y poquito a poco se un pelin más egoísta sanamente
Sin dejar de ayudar pero no que nos adsorban
No creo que esto te ayude, ya te dije no estoy en mi mejor
Momento
Un beso
Hemos hablado tantas veces...
Sabes lo que hay que hacer. Claro que lo sabes. Pero es tan díficil ir en contra de la propia naturaleza.
Yo logré transformarme en muchos aspectos. Tú que me conoces lo sabes. Pero tenía menos de 20 años. Siendo tan joven quizás sea más fácil. Estás a medio cocer. No lo sé.
Lo que sí sé es que ya sabes dónde estoy si necesitas un café.
No podrías haberlo expresado mejor, es como si estuviera leyendo mi propio pensamiento escrito por otra persona. A veces tambien pienso que debería ser mucho más egoísta, como el mundo que me rodea, pero supongo que perdería mi esencia, dejaría de ser lo que soy, y entonces ya no me quedaría nada.
Es muy necesaria la campaña contra la pornografia infantil, entre todos podremos conseguir que esto poco a poco se erradique, yo tambien me uní, es algo que nos importa a todos la verdad
por cierto, estamos buscando gente que le interese compartir enlaces para mejorar la posicion en buscadores, te dejo mi email intercambios@Ymail.com
Un saludo, la campaña es un éxito gracias a todos
Jose
Gracias a todos por compartir conmigo vuestra opinión y vuestras experiencias.
Y bienvenidos a titokokin y lucía.
Mientras tanto, seguiré con esta lucha interior que me ayude a encontrar el camino. Un camino en el que me encanta que estéis...
Besitos.
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